Hoy por fin y sin miedo, mi historia confieso
Soy el mayor alumno sieso
Aquel aburrido que nunca hizo ruido
Ubicado siempre en el del primer asiento
Que por nada dice “lo siento”
Espontenidad se esfuma como el humo de un pitillo
En un continuo, aquí te mate y aquí te pillo…
Sin duda, debe intentar ser un poco más picaresco
Y su mayor error e indetectable error
Fue sentir, ante calor, temblor
Aquel que no se perdió en ESO
Por apartar tanta compañía y beso
Y solo acompañado con sibro y mucho silencio
Mi corazón pensó: así de que me libro
Y al alimentarse de desgracias
Por nada, da sinceras gracias.
Y de la vida, medalla de plata
Ser perfecto y distante autómata
Cuando diferencia no fortalece sino mata
Y es que normalmente lo peculiar
De compañía no es auxiliar
Su conocimiento no parece del mundo cimiento
Y la verdad, lo sentí como niño y loco, jamás miento
Destapando esta ambivalente verdad:
El ser humano solo se dirige a si mismo en crueldad
Autoconocimiento es la resonancia
de quien habitó tanto tiempo en lejana distancia
Alejando la necesaria farándula
Como si fuese un temido moridisco de tarántula
Cuando soledad es pistola
Que el vacío apabullantemente asola
Soledad despertó como un milagro
Y corazón roto peinsa de que me salvo
Como si amar fuera sacro
Cierto es que resulta caro
Y lo no lo digo solo por el dinero…
Donados esos quebrados “te quiero”
En silencio, se queda lo que empezó tan fiero…
Si te obsesionas con las notas
Pierdes la vida y no lo notas
Con el tiempo, no eres un ruidoso personaje, un famoso notas
Pero no descifras tampoco tus derrotas
Aplazados buenos días
Ocultaron las caricias
Y ese claro “me apetecias”
El silencio parecía más oportuno
Que desplazar amor ninguno
Cuando basta solo una marcada sonrisa
Para avivir una moribunda brisa
O un amigo de tu corazón huésped
Tarde descubrí que el cespéd,
A curiosidad sacia su eterna sed
#Marc Salvador Queral #SXX1 #Aprendizaje Dialógico #Soledad #Juventud #Educación